Inspirandose en las jirafas, uno de los animales más representativos de África, el despacho R&L Architects diseñó uno de los estadios más bellos y de menor costo que hasta hoy se haya construido para un mundial de fútbol.
El dispendio de recursos económicos no produce buena arquitectura. La buena arquitectura es aquella que satisface eficientemente las necesidades de los usuarios, obedece a la idiosincrasia de los habitantes del lugar donde se erige, respeta el paisaje natural y se construye haciendo un uso racional y ético de los recursos y materiales disponibles, por sencillos y precarios que estos sean.
El valor de la arquitectura es independiente al tamaño de la obra, la complejidad del programa arquitectónico, los presupuestos y recursos disponibles. La eficiencia y la belleza son valores que pueden estar presentes tanto en un gran edificio como en la casa más pequeña.
El Estadio Mbombela de Sudáfrica es un ejemplo de que la buena arquitectura es el resultado del talento y sensibilidad de sus creadores, que sin necesidad de sumas millonarias de dinero, ni de sofisticadas tecnologías y materiales, hicieron uno de los estadios más originales y bellos que se hayan construido para un mundial de fútbol.
De todos los estadios construidos para la Copa Mundial de fútbol Sudáfrica 2010 y en toda la historia de la FIFA, el Mbombela -el único estadio diseñado por arquitectos sudafricanos- ha sido el que ha tenido un costo más bajo (128 millones de dólares).
El abatimiento de costos fue posible debido a que R&L Architects, diseñadores del proyecto, desde un principio decidieron hacer un edificio sencillo, construido estrictamente con materiales de de alta resistencia, que requirieran un mínimo de mantenimiento y que hubieran sido producidos por la industria local.
El Estadio Mbombela –cuyo nombre significa, en el idioma siswati, “mucha gente junta en un espacio reducido”- comenzó a edificarse en febrero de 2007 y se concluyó a finales de 2009, siempre bajo una seria polémica y la supervisión de la FIFA.
Para la construcción del estadio se utilizaron materiales fabricados en Sudáfrica, de medidas estándar, económicos, fáciles de conseguir y transportar como: concreto, malla y perfiles de acero y lámina de acrílico transparente.
El estadio, que tiene una capacidad de 43.500 espectadores, está diseñado con una forma rectangular ligeramente curvada en los extremos. Los arquitectos decidieron resolver la planta con forma rectangular -en lugar de la típica planta ovalada que presentan la mayoría de los estadios de fútbol- debido a que el rectángulo requiere de soluciones constructivas y detalles menos complejos, lo que permite la estandarización y por lo tanto la reducción de costos de mano de obra y el desperdicio de materiales.
El estadio se localiza a 5 km al oeste de la ciudad de Nelspruit y cerca de la carretera que conecta Gauteng y Mozambique. Una red de carreteras nuevas y actualizadas se construyó para acceder fácil y rápidamente a los terrenos que ocupa el estadio y sus alrededores. Es importante mencionar que la construcción de estas nuevas vías permitió que todo el material que conforma la cubierta del estadio, fabricado en la localidad de Gauteng, fuera entregado por carretera.
El escenario donde se encuentra el Estadio Mbombela esta ubicado entre la sabana virgen, en donde predominan los árboles espinosos y las acacias; algunas tierras destinadas a la siembra de frutos cítricos, plátanos y aguacates y unas espectaculares colinas de granito.
El camino que conduce al estadio está ubicado en medio del bosque de acacias, cuyos árboles lo enmarcan para dar una verdadera experiencia de la sabana.
El clima subtropical y el paisaje de la región establecieron algunas de las pautas del proyecto, que se resolvió a partir de pasillos abiertos, omitiendo en la medida de lo posible los muros. Esta solución, aunada a los 6m de separación que se dejaron entre la parte alta de las gradas y la cubierta que parece flotar sobre el estadio, permite una ventilación constante en los días calurosos y genera una sensación de apertura y continuidad ya que los espectadores pueden disfrutar del paisaje desde cualquiera de los 4 costados del estadio.
El diseño estructural del estadio fue inspirado en uno de los animales más hermosos y simbólicos del país: las jirafas, animales representados en las 18 columnas de acero de 48m de altura que a partir de una serie de tensores y armaduras de acero soportan la cubierta del estadio. La cubierta voladiza, hecha con un material transparente que facilita la iluminación, abarca una superficie total de 22.500m² y cubre un claro de 36m, es decir, cerca del 95% de las localidades. El peso de la cubierta es de 55kg/m², lo que hace que el techo sea muy ligero, lo que fijó un nuevo estándar en el diseño de cubiertas para estadios.
Otro detalle curioso de este edificio son sus asientos, los cuales fueron pintados de color blanco y negro para imitar el pelaje de las cebras, otros de los animales representativos de Sudáfrica. La disposición de las gradas, divididas en tres niveles, genera una especie de cazo que permite que los fanáticos del fútbol estén lo más cerca posible del campo de juego, cercanía que, además de que permite observar mucho mejor el espectáculo, intensifica la energía y el sonido de las multitudes al interior del estadio.
El color, fue también un recurso de gran importancia para realzar la belleza del estadio. Más allá de los grises muros y pisos de concreto, típicos de muchos estadios, los diseñadores pintaron las estructuras de acero, los muros y pisos de los vestíbulos y zonas de servicio como: locales comerciales, vestidores, oficinas de colores verdes, azules, rojos, anaranjados y amarillos, lo que hace del edificio un espacio lúdico y de gran vitalidad, que hace eco al paisaje exterior.
El ahorro de energía fue otro de los aspectos que también se resolvió de manera muy acertada en el diseño del estadio, con soluciones tan sencillas como: Dejar espacios abiertos en donde fuera posible para permitir la ventilación natural, con lo que prácticamente se eliminaron el uso de calefacción y refrigeración, lo que reduce enormemente el gasto de energía.
Los estadios son a menudo edificios que le dan la espalda a su entorno para convertirse ellos mismos en protagonistas, sin embargo, el diseño del Estadio Mbombela abre sus vistas hacia el exterior y enmarca el paisaje al mismo tiempo que sus formas se integran con la vegetación y remiten a la fauna más representativa del país. Lo que hace de este sencillo diseño un espacio original, bello y confortable, características por las cuales se hizo merecedor del premio British Overseas Expertise Award en la categoría de deportes y entretenimiento.
Otros datos sobre el estadio Mbombela:
Costo total de la obra: 128 millones de dólares
Altura de las Jirafas: 48m
Altura de la cubierta con respecto a la cancha: 35m
Servicio de baños: 1,030 (622wc y 408 mingitorios)
Volumen de concreto utilizado: 45,000m3
Peso de la estructura métalica del techo: 1,450ton
Claro que cubre el techo: 36m en cantiliver
Partidos que se jugarán en el estadio: 4 de la etapa inicial.
Honduras-Chile (16 de junio)
Italia-Nueva Zelanda (20 de junio)
Australia-Serbia (23 de junio)
Corea del Norte-Costa de marfil (25 de junio)
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